Perú se perfila como el nuevo centro logístico de Sudamérica con el puerto de Chancay
La modernización portuaria promete revolucionar el comercio con Asia y reducir costos y tiempos de transporte.
Con la próxima apertura del puerto de Chancay, Perú está en la antesala de un cambio trascendental en el comercio internacional, consolidándose como un punto estratégico para las rutas logísticas entre Sudamérica y Asia. Esta moderna infraestructura, que estará totalmente automatizada, reducirá considerablemente los tiempos y costos de transporte, posicionando al país como un actor clave en la región.
El puerto de Chancay, cuya inauguración está prevista para noviembre, promete ser el más moderno del continente americano. Gracias a su automatización avanzada, será posible acortar el tiempo de transporte entre Perú y China, logrando envíos directos en tan solo 25 días, en comparación con los 35 días actuales. "Esta infraestructura permitirá reducir de 10 a 12 días el tiempo de traslado de productos desde la costa pacífica hacia Shanghái", destacó Sayuri Sakihama Meléndez, subdirectora de promoción comercial de PromPerú. Para las exportaciones de países atlánticos como Brasil y Argentina, el impacto será aún mayor, acortando hasta un mes completo los tiempos de tránsito hacia Asia.
La relevancia de este nuevo puerto trasciende las fronteras peruanas, ya que también beneficiará a otros países sudamericanos. La carretera interoceánica que conecta Brasil con Perú permitirá que productos brasileños, por ejemplo, utilicen esta ruta para llegar más rápido a los mercados asiáticos. "Chancay será una alternativa viable y eficiente para muchas naciones de la región", añadió Sakihama.
Uno de los elementos clave que potenciará este cambio logístico es la automatización de vanguardia del puerto, la cual agilizará significativamente los procesos de carga y descarga. Gracias a la inversión de China Cosco Shipping, la tecnología utilizada será similar a la de Shanghái, lo que permitirá realizar descargas de buques en menos de una hora, cuando antes el proceso tomaba tres horas. Además, la capacidad del puerto para recibir embarcaciones de gran tamaño, como los Post Panamax, facilitará el manejo de volúmenes de carga más grandes, lo cual será esencial para productos perecederos y minerales que requieren un transporte rápido.
El impacto económico que traerá el puerto de Chancay no se limitará solo a Perú. La posibilidad de acortar tiempos de tránsito mejorará la competitividad de los exportadores sudamericanos, quienes podrán hacer llegar sus productos a Asia en mejores condiciones y a menor costo. "Perú tiene una ventaja comparativa con 22 tratados de libre comercio, lo que hará que los productos lleguen con menores aranceles al mercado asiático", explicó Sakihama.
Mirando al futuro, el puerto de Chancay tiene proyecciones a largo plazo que podrían transformar por completo la logística en la región. En los próximos diez años, Perú podría consolidarse como el principal hub logístico de las Américas, cambiando las rutas de carga y mejorando las conexiones comerciales entre Sudamérica y Asia.
Perú, con su nueva infraestructura portuaria, no solo fortalecerá su posición como punto estratégico en la región, sino que también creará oportunidades para que todo el continente se beneficie de tiempos de transporte más rápidos y eficientes.