Honda busca reducir aranceles con baterías de Toyota en EE.UU.

En un movimiento estratégico para mitigar los riesgos asociados a los aranceles comerciales, Honda Motor ha decidido abastecerse de baterías para sus vehículos híbridos desde la planta de Toyota Motor en Estados Unidos. Según informó el diario Nikkei, esta alianza permitirá a Honda obtener las baterías necesarias para aproximadamente 400,000 unidades híbridas anuales a partir del año fiscal 2025, cubriendo así la demanda total de sus modelos híbridos en el mercado estadounidense.

Actualmente, Honda importa baterías desde Japón y China para sus vehículos ensamblados en EE.UU., pero la incertidumbre generada por las políticas arancelarias de la administración Trump ha impulsado a la compañía a buscar alternativas locales. Esta decisión no solo reduce la dependencia de proveedores externos, sino que también protege a la empresa de posibles incrementos en los costos de importación.

Aunque Honda no ha confirmado oficialmente esta información, un portavoz de la empresa mencionó que no revelan detalles sobre sus proveedores de piezas para la producción en masa. Por su parte, Toyota se ha mantenido al margen, declinando hacer comentarios al respecto. Sin embargo, esta colaboración refleja una tendencia creciente entre las automotrices para adaptarse a un entorno comercial cada vez más volátil.

Esta no es la primera medida que toma Honda para protegerse de los aranceles. Recientemente, la compañía decidió trasladar la producción de su próximo híbrido Civic a Indiana, EE.UU., en lugar de fabricarlo en México, como estaba planeado inicialmente. Este cambio busca evitar posibles gravámenes sobre uno de sus modelos más populares, demostrando la importancia de ajustar las cadenas de suministro en un contexto de tensiones comerciales.

La alianza entre Honda y Toyota marca un hito en la industria automotriz, destacando cómo las empresas están priorizando la resiliencia frente a los desafíos arancelarios. Con esta estrategia, Honda no solo fortalece su posición en el mercado estadounidense, sino que también refuerza su compromiso con la producción local y la estabilidad financiera ante un escenario global incierto.