Desafíos de la sostenibilidad empresarial en América Latina
Latino América enfrenta desafíos en adopción sostenible, solo el 22% de las empresas ve la sostenibilidad como generadora de valor a largo plazo, reveló encuesta.
El auge de la sostenibilidad ha llevado a que las empresas en América Latina redoblen sus esfuerzos para incorporar prácticas con criterio ESG (Enviromental, Social and Governance). Sin embargo, un estudio de Global Reporting Initiative (GRI) destaca que solo el 22% de los miembros de los encuestados entienden la sostenibilidad como un enfoque de negocio para generar valor a largo plazo.
A pesar de los beneficios evidentes, las juntas directivas muestran una participación "escasa" en decisiones dirigidas a la sostenibilidad en países como Colombia, Perú, Argentina, México y Chile
El estudio de GRI revela que solo el 36% de los encuestados considera que las juntas directivas proporcionan lineamientos y directrices para la estrategia de sostenibilidad, y no siempre es el CEO quien toma estas decisiones. No obstante, la participación de los directivos sigue siendo limitada, ya que el 25% simplemente aprueba las directrices de sostenibilidad establecidas por la gerencia.
Una encuesta de Schneider Electric y Canalys revela que si bien las empresas invierten en estrategias de sostenibilidad, luchan por traducir estas inversiones en acciones concretas. El 61% de los socios de canales de TI tiene personal dedicado a la sostenibilidad, pero solo un tercio ha establecido objetivos ESG.
Además, Schneider Electric delineó algunos puntos esenciales para llevar a cabo inversiones efectivas en ESG, buscando así un uso eficiente del presupuesto destinado a la sostenibilidad empresarial: Es importante fortalecer el equipo humano para potenciar la estrategia de sostenibilidad, además de establecer metas claras en materia de sostenibilidad. Otro punto importante es evaluar la huella de carbono y trazar un plan hacia la neutralidad de carbono.
Asimismo, desarrollar servicios de evaluación personalizados para asistir a los clientes en sus esfuerzos sostenibles. Finalmente, ejercer influencia sobre los proveedores para fomentar una mayor adopción de prácticas ESG.