La inflación en Estados Unidos desciende al 2.9% en julio
La economía estadounidense muestra señales de recuperación con una inflación que alcanza su nivel más bajo en más de tres años, preparando el terreno para posibles recortes en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal en septiembre.
La inflación interanual en Estados Unidos ha caído al 2.9% en julio, marcando su punto más bajo desde marzo de 2021. Este descenso es una clara señal de que el peor repunte de precios en cuatro décadas está quedando atrás. Según el informe del Departamento de Trabajo, los precios al consumo aumentaron solo un 0.2% de junio a julio, luego de una ligera caída en junio, la primera en cuatro años. Este comportamiento moderado en los precios refuerza la expectativa de que la Reserva Federal podría reducir su tasa de interés clave en el mes de septiembre.
El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, ha manifestado que esperará más evidencias de una desaceleración continua en la inflación antes de proceder con un recorte de tasas. Se espera que el próximo informe sobre la inflación, que se publicará antes de la reunión del 17 y 18 de septiembre, muestre que los precios se mantuvieron relativamente estables, lo que podría impulsar la decisión de la Fed.
El descenso en la inflación ha sido impulsado por varios factores clave. Las cadenas de suministro globales se han recuperado, lo que ha aliviado los costos de producción. Además, un aumento en la construcción de apartamentos en grandes ciudades ha contribuido a la moderación de los costos de alquiler, y las altas tasas de interés han ralentizado las ventas de automóviles, obligando a los concesionarios a ofrecer mejores condiciones a los compradores.
Por otro lado, los consumidores, especialmente aquellos con ingresos más bajos, se han vuelto más cautelosos con sus gastos, optando por productos más económicos y renunciando a artículos de lujo. Esta actitud ha forzado a muchas empresas a contener sus precios o incluso a reducirlos en algunos casos. Sin embargo, algunos servicios, como los seguros de automóviles y la asistencia sanitaria, continúan registrando incrementos significativos. A pesar de ello, los economistas anticipan que estos costos también comenzarán a crecer más lentamente en los próximos meses.
La desaceleración de la inflación también ha tenido un impacto en los mercados financieros. Poco después de la publicación del informe, los principales índices bursátiles de Wall Street registraron ligeros aumentos. El índice Dow Jones subió un 0.1%, alcanzando los 39.810,96 puntos, mientras que el S&P 500 y el Nasdaq también mostraron incrementos del 0.1%.
Además de la inflación, la Reserva Federal está prestando cada vez más atención al mercado laboral, ya que sus objetivos principales incluyen no solo la estabilidad de precios, sino también el apoyo al empleo máximo. En julio, la tasa de desempleo aumentó ligeramente al 4,3%, aunque esta subida se debe en gran parte a una afluencia de nuevos solicitantes de empleo, incluidos inmigrantes recientes que no han encontrado trabajo de inmediato.
El jueves, se espera la publicación de nuevos datos sobre ventas minoristas, los cuales podrían mostrar un aumento modesto en el gasto de los consumidores durante julio. Mientras los consumidores mantengan su disposición a gastar, es probable que las empresas sigan contratando personal o, al menos, mantengan a su fuerza laboral actual.
El panorama económico en Estados Unidos muestra una mejora significativa con la inflación en su nivel más bajo desde 2021. Este progreso no solo alivia a los consumidores, sino que también prepara el escenario para posibles recortes en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal. Sin embargo, la evolución de la inflación y del mercado laboral en los próximos meses será crucial para determinar la dirección futura de la política monetaria en el país.